Theirworld informa que casi 40 millones de estudiantes ven interrumpida su educación cada año a causa de las catástrofes naturales, lo que provoca graves repercusiones sociales y afecta a la economía del país a nivel individual, local y nacional. El debilitamiento de la economía hace que los esfuerzos de recuperación a largo plazo sean lentos o inexistentes, lo que repercute en la capacidad de la nación para reconstruir infraestructuras como los enlaces de transporte, los hospitales, las viviendas y las escuelas.

Según la UNESCO, "si todos los estudiantes de los países de bajos ingresos terminaran la escuela primaria con conocimientos básicos de lectura, al menos 171 millones de personas podrían salir de la pobreza". Esto ilustra cómo el apoyo a las escuelas después de una catástrofe puede proporcionar un alivio inmediato y a largo plazo a las complejidades sociales y económicas. En última instancia, la educación tiene un efecto catalizador: desde la lucha contra la pobreza y la reducción de las vulnerabilidades, hasta el alivio de las desigualdades de género.

Los gobiernos y las organizaciones no gubernamentales comprenden las implicaciones de la interrupción de la educación y tratan de reanudar la escolarización lo antes posible después de las crisis/catástrofes naturales. Aunque se trata de un esfuerzo positivo, a menudo faltan recursos para garantizar una recuperación rápida, segura y adecuada. En consecuencia, los estudiantes son ubicados en Espacios de Aprendizaje Temporales (TLS) inseguros, hechos con materiales de desecho, lonas y láminas de hierro, o se les enseña en los edificios existenes dañados. Ambas opciones pueden ser peligrosas e inadecuadas para que los estudiantes aprendan y prosperen.

El tipo de catástrofe, los daños sufridos, el país en el que trabajamos y el nivel de financiación determinarán el alcance del programa de recuperación de escuelas. Trabajamos con la comunidad y los órganos de gobierno para ofrecer las mejores opciones, que pueden incluir la construcción de espacios de aprendizaje temporales resistentes a los desastres y/o la reparación, reconstrucción y adaptación de las escuelas existentes.

Sabemos que el camino desde la catástrofe hasta la recuperación va más allá de la sustitución de las infraestructuras. Además de la reconstrucción física de los campus escolares, nuestro personal y los voluntarios se encargan de la ejecución de proyectos de renovación como la educación en materia de agua, saneamiento e higiene, la reducción del riesgo de catástrofes, la formación en técnicas de construcción y la instalación de tecnología educativa. Esta lista no es exhaustiva, sino que está diseñada para capacitar a las comunidades a fin de fortalecer aún más la resiliencia de la escuela y la comunidad.

Haga clic aquí. para hacer un recorrido por la reconstrucción de nuestra escuela en Mozambique!

Salud y seguridad

All Hands and Hearts hace de la seguridad de las personas para las que trabajamos, y que trabajan con nosotros, una prioridad.

Empleamos un enfoque de la salud y la seguridad basado en los riesgos, que estudia los posibles peligros de un lugar de trabajo y procura reducir al mínimo esos peligros mediante controles, como directrices de uso, capacitación, supervisión y la aplicación de equipo de protección adecuado.

Cada uno de nuestros lugares de trabajo tiene normas operacionales y controles de riesgo específicos para reducir la probabilidad de que ocurra un peligro y planes de contingencia para reducir la gravedad de un peligro en caso de que ocurra.

Donar a Educación para Todos